En San Ignacio, cada vez que aparecía un turista un enjambre de niños (algunos guaraníes, otros de por ahí) se les abalanzanban ofreciéndoles orquídeas, una piedrita o nada, a cambio de una monedita.
Un día vimos que había un tipo en una camioneta que los traía a las 7 de la mañana para agarrar el primer micro y los pasaba a buscar a las 22 cuando cerraban las ruinas...
Es lo que este sistema caga...
1 comentario:
Esta es la version de Mati de lo que ya he dicho yo ^^
pensamos lo mismo
Publicar un comentario